El coaching es una magnífica herramienta para ayudarnos en situaciones cotidianas para las que otro tipo de ayuda puede parecernos innecesario.
En sus inicios, el coaching se creó como un método para ayudar a deportistas a sacar su mayor potencial en el juego.
Posteriormente, y en vistas del éxito que obtuvo, se extrapoló a los demás aspectos de la vida. Su metodología ayuda a las personas a mirar en su interior desde otra perspectiva, generando cambios que les permiten aumentar la conciencia y la responsabilidad sobre ellos mismos, para alcanzar los objetivos que se propongan.
Cuándo necesitas un Coach
¿Tienes objetivos que te cuesta mucho conseguir?
¿Sientes que hay algo en tu interior que te frena y no sabes qué es?
¿Crees que serías más feliz siendo como te gustaría ser pero no sabes por dónde empezar?
¿No encuentras tu sitio en el mundo y no sabes por qué?
¿Te cuesta comprometerte con los cambios y abandonas con facilidad?
Un Coach coloca un espejo delante de ti para que veas exactamente eso que necesitas ver.
Únicamente conociéndote en profundidad podrás saber qué es lo que te está impidiendo alcanzar tus objetivos.
Además, necesitas desarrollar tus fortalezas y habilidades, y un Coach te da las herramientas necesarias para que realices todo ello.
Qué es el Coaching Transpersonal
El Coaching Transpersonal es el más íntimo y reflexivo. Llega a niveles más profundos del inconsciente, poniendo el foco en la conciencia del Ser.
Es mucho más retador, y por tanto más transformador. Te ayuda a DESPERTAR.
Como dijo el gran Albert Einstein, «ningún problema puede ser resuelto en el mismo nivel de consciencia en el que fue creado.»
Diferencias entre Psicología y Coaching
La psicología se asienta sobre una formación específica acerca de los procesos psicológicos e implementa técnicas y metodologías con el fin de sanar viejas heridas, bloqueos o patologías. Se centra en el problema del paciente.
Un psicólogo puede aconsejar y dar pautas de actuación, entrenar capacidades e intervenir directamente sobre las necesidades del paciente.
El Coach ayuda a superar retos, dificultades o bloqueos mentales o emocionales. También puede ser de ayuda en procesos de desarrollo personal. Utiliza una metodología concreta por la cual el cliente descubre sus recursos e incorpora habilidades y alternativas antes no contempladas.
El Coach no da consejos ni indicaciones, el proceso depende exclusivamente del cliente.